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Cuando el brillante fuego de Arien, el Sol,
apareció en el mundo, surgió en el este el pueblo mediano
que recibiría el nombre de hobbits. Eran gentes -se decía
que emparentados con los humanos- que excavaban
agujeros y vivían en ellos, pero que eran más pequeños
que los enanos y con una esperanza de vida en
torno a los cien años.Nada se sabe de la raza de los hobbits antes
del año 1050 de la Tercera Edad, cuando se dice que vivían
con los Hombres del Norte en la cuenca septentrional
del Anduin, entre las Montañas Nubladas y Bosqueverde. En ese siglo,
una fuerza maligna entró en Bosqueverde, que pronto sería
conocido como el Bosque Negro. Quizá fuera este hecho lo que obligó
al pueblo hobbit a abandonar la cuenca del Anduin. En los siglos posteriores,
los hobbits emigraron hacia el oeste, cruzando las Montañas Nubladas,
y entraron en Eriador, para vivir con los elfos
y los hombres en una tierra fértil y despejada.Los hobbits
poseían ciertas características comunes. Todos medían
entre sesenta y ciento veinte centímetros de estatura; poseían
dedos largos, un aspecto algo rollizo, el pelo castaño y rizado
y unos pies enormes que llevaban descalzos. Los hobbits eran un pueblo
conservador y sin pretensiones, cuyos excesos se limitaban a vestir con
colores vivos y tomar seis buenas comidas al día. Su única
excentricidad era el arte de fumar hierba para pipa, lo cual, decían
ellos, era su contribución a la cultura del mundo.Se decía
que había tres ramas de hobbits: los Pelosos, los Albos y los Fuertes.
Los Pelosos, la más numerosa de las ramas hobbit, eran también
los más pequeños. Tenían el pelo y la piel de color
castaño oscuro. Les encantaban las regiones de colinas y fueron
el primer pueblo hobbit que atravesó las Montañas Nubladas
y entró en Eriador.Casi un siglo después, en el año
1150 de la Tercera Edad, los Albos siguieron a sus parientes Pelosos. Entraron
en Eriador a través de los desfiladeros que se encuentran al norte
de Rivendel. Los Albos eran la rama hobbit menos
numerosa. Eran más altos, más delgados y se pensaba que más
dispuestos a correr aventuras que sus parientes.Los Fuertes fueron
los últimos hobbits que llegaron a Eriador. Eran los más
parecidos al hombre de su raza, más corpulentos
que las otras ramas y, para maravilla de sus parientes, algunos tenían
barba. Preferían vivir en tierras llanas cerca de ríos y
conocían la fabricación de embarcaciones, la pesca y el arte
de la natación. Se dice que los Fuertes no empezaron a emigrar al
oeste hasta el año 1300, cuando muchos de ellos atravesaron el Paso
del Cuerno Rojo; pero quedaron pequeños asentamientos en zonas tales
como los Campos Gladios hasta doce siglos más tarde de esa fecha.
En su mayoría, los hobbits de Eriador se dirigieron a las tierras
de los hombres cercanas a la ciudad de Bree. En el año 1601, casi
todos los hobbits de Bree volvieron a marchar hacia el oeste, a las fértiles
tierras al otro lado del río Brandivino. Allí fundaron la
Comarca,
el país que a partir de entonces sería conocido como la patria
de los hobbits. Los hobbits tienen una cronología que comienza en
esa fecha. Por naturaleza, los hobbits tenían un temperamento pacífico
y hasta el año 2747 no hubo un encuentro armado dentro de la Comarca.
Se trató de una incursión de orcos
sin importancia, que los hobbits, con algo de exageración, llamaron
Batalla de los Campos Verdes. Bastante más serio fue el Largo Invierno
de 2758 y los dos años de hambruna que le siguieron. Pero, en comparación
con otros pueblos de la Tierra Media, vivieron en paz durante largo tiempo.
Por lo general, las otras razas los consideraban de nula importancia y,
por su parte, los hobbits no tenían ninguna ambición de las
grandes riquezas o del poder de
los demás. Por toda la Comarca, sus pequeños
pueblos y asentamientos crecieron. Hobbiton, Barrancas de Tuk, Cavada Grande,
Oatbarton, Ranales y una docena más. Y, a su manera, los hobbits
prosperaron. Hay pocos hobbits famosos antes del siglo treinta de la Tercera
Edad del Sol, porque hasta entonces la raza en sí era casi completamente
desconocida para el mundo. Pero, claro está, los hobbits tenían
su propio baremo de fama. En las leyendas de la Comarca,
los primeros hobbits que se nombran son los hermanos Albos Marcho y Blanco,
quienes guiaron a los hobbits de Bree a la Comarca.
Esta tierra se la cedieron los dúnedain de Arnor, a cuyo rey los
hobbits rendían un vasallaje nominal. En el año 1979, el
último rey de Arnor desapareció del norte y se instauró
el cargo de Thain de la Comarca. El primer Thain
fue el hobbit Bucca de Marjala, de quien descendieron todos los Thain.
Bandobras Tuk fue un gigante entre los hobbits, que medía un metro
treinta y cinco y que, montado a caballo, se puso valerosamente al frente
de su pueblo en la Batalla de los Campos Verdes contra los orcos.
Se dice que con un garrote mató a su cacique Golfimbul. Por su tamaño
y sus hazañas lo llamaron Toro Bramador Tuk. Otro hobbit importante
por sus hechos dentro de los confines estrechos de la Comarca
fue Isengrim Tuk, llamado Isengrim II, vigésimo segundo Thain de
la Comarca, arquitecto de los Grandes Smials
de las Barrancas de Tuk y abuelo de Bandobras Tuk. Pero, cosa típica
de los hobbits, quizás el más honrado de los héroes
antes de la Guerra del Anillo fuera un humilde granjero llamado Thobold
Corneta de Valle Largo, quien en el siglo veintisiete fue el primero en
cultivar la planta galenas, llamada también hierba para pipa. El
primer hobbit que se hizo famoso en el mundo fue Bilbo
Bolsón de Hobbiton, quien fue empujado a desempeñar un
papel protagonista en la Misión de Erebor por el mago Gandalf
y el rey enano Thorin Escudo de Roble. ésta es la aventura que se
cuenta en el relato que Bilbo tituló Historia
de una ida y una vuelta, en la cual resultaron muertos
trolls,
orcos, lobos,
arañas y un dragón.
En una parte de la aventura se cuenta que Bilbo Bolsón
adquirió un anillo mágico y, aunque en aquel momento pareció
de poca importancia, fue un acto que puso en peligro a todos los que habitaban
la Tierra Media. Con el tiempo se descubrió la identidad del Anillo
único y éste pasó al heredero de Bilbo,
Frodo
Bolsón. En el año 3018, el mago Gandalf
visitó a Frodo y le propuso la Misión
del Anillo. Si la empresa tenía éxito, el Anillo único
sería destruido y el mundo se salvaría del dominio de Sauron.
Se constituyó la Comunidad del Anillo, en la que fueron escogidos
otros ocho personajes como compañeros de Frodo
Bolsón, el Portador del Anillo, en su Misión. Samsagaz
Gamyi, criado de Frodo, fue uno de ellos.
Samsagaz
era una persona sencilla y leal, que en una ocasión salvó
tanto a su amo como a la Misión, y fue Portador del Anillo durante
un breve período. Peregrin Tuk, heredero
del Thain de la Comarca, y Meriadoc
Brandigamo, heredero del Señor de los Gamos, fueron los otros dos
hobbits de la Comunidad. En el transcurso de la Misión, tanto Pippin
como Merry (así se los llamaba más
comúnmente) fueron hechos caballeros de Gondor.
Sin embargo, fue otro hobbit el que destruyó el Anillo único.
Sméagol Gollum fue el único hobbit
que sucumbió a las verdaderas artes malignas. Era un hobbit de la
rama de los Fuertes, que vivía cerca de los Campos Gladios, donde
fue encontrado el Anillo único. Gracias al poder del Anillo su vida
se alargó, pero su aspecto se transformó en algo espectral,
y la tenebrosa influencia del Anillo le hizo rehuir la luz. Durante casi
cinco siglos, Gollum vivió oculto en cavernas
bajo las Montañas Nubladas, hasta que el hobbit Bilbo
Bolsón llegó a su escondite y cogió el Anillo
único. De Bilbo pasó a Frodo
Bolsón y, en los ocho años en los que el Anillo no estuvo
en sus manos, Gollum jamás dejó
de buscarlo. Al final cayó sobre Frodo Bolsón
en el Monte del Destino. Merced a su fuerza maligna, Gollum
consiguió apoderarse del Anillo, pero tropezó y cayó
con su preciado premio a las ardientes entrañas de la Tierra, y
el Anillo único fue destruido. |